A los mayores les gustan las cifras. Cuando se les habla de un nuevo amigo, jamás preguntan sobre lo esencial del mismo. Nunca se les ocurre preguntar: “¿Qué tono tiene su voz? ¿Qué juegos prefiere? ¿Le gusta coleccionar mariposas?” Pero en cambio preguntan: “¿Qué edad tiene? ¿Cuántos hermanos? ¿Cuánto pesa? ¿Cuánto gana su padre?” Solamente con estos detalles creen conocerle”. El Principito
martes, 20 de septiembre de 2022
Lo mejor de nuestras vidas - Lucía, mi pediatra
El cerebro afirmativo del niño - Daniel J. Siegel
El poder de la presencia - Daniel J. Siegel
En la línea de lo que describe en sus anteriores libros, en este nos habla sobre la importancia de la presencia en la vida de nuestros hijos. En un mundo donde las prisas son nuestro día a día, donde no nos paramos a preguntarnos, en muchas ocasiones, ni cómo estamos, Siegel y Payne comienzan su libro tratando el tema del dolor y cómo tenemos que dejar que aprendan que en la vida existe el dolor, pero esa lección debe ir acompañada de la profunda conciencia de que nunca tendrán que sufrir solos. Que nuestra misión como progenitor no es impedir que experimenten contratiempos y fracasos, sino proporcionarles instrumentos y la resiliencia emocional que necesitan para capear las tormentas de la vida y, después caminar a su lado a través de esas tormentas. Esto me recuerda a lo que hablaba Irene Villa sobre las piedrecitas del camino y cómo debemos hacer para enseñarles a que no somos nosotros quiénes se la retiramos, sino que debemos enseñarles a pasar por ellas. Estar presentes no es salir corriendo a protegerlos de todos los problemas, es aprender a gestionar los obstáculos a los que se enfrentan.
Se trata de situarnos a su lado y explicarles "Estás a salvo, Estoy aquí. No estás solo. Todo irá bien". Según los autores, las investigaciones demuestran que los niños convencidos de que sus cuidadores estarán presentes para ellos una y otra vez, desarrollan la independencia y la resiliencia necesarias para adquirir la seguridad en sí mismos que les permitirá abandonar sus zonas de confort.
Rabietas - Miriam Tirado
Disciplina sin lágrimas - Siegel, Daniel J.
Fue el primer libro que me leí del autor, sin embargo, no el último. Al parecer, el libro más conocido del mismo es "El cerebro del niño: 12 estrategias revolucionarias para cultivar la mente en desarrollo de tu hijo". Disciplina sin lágrimas me ha resultado un libro ameno de leer y en el que he aprendido lo que significa conectar con nuestro hijo y atender sus necesidades. Está ilustrado con viñetas que muestran ejemplos sobre cómo redirigir una conversación desde la calma y el respeto.
Disciplina sin lágrimas se podría resumir en una frase muy simple: CONECTAR y REDIRIGIR. De hecho, he ido subrayando una serie de párrafos que requiere especial atención y que describen la estupenda lectura que supone:
"Conexión significa que damos a nuestros hijos atención, que los respetamos lo suficiente para escucharles y que les transmitimos apoyo, nos guste o no su manera de comportarse".
"La disciplina sin lágrimas nos permite comunicar a nuestros hijos esto: Estoy contigo. Tienes mi apoyo. Incluso cuando estás enfadado y no me gusta tu manera de actuar, te quiero, y estoy a tu lado. Entiendo que lo estas pasando mal y aquí me tienes".
"Si ves que el comportamiento del niño apunta en una dirección que no te gusta, hazte esta pregunta: ¿Está enfadado, hambriento, rabioso, aislado, agotado?".
"Cuando notan nuestro amor y nuestra aceptación, cuando se sienten sentidos por nosotros, incluso sabiendo que no nos gustan sus acciones (o a ellos no les gustan las nuestras), pueden empezar a recuperar el control y permitir que su cerebro superior vuelva a implicarse..."
"A veces, hemos de adaptar nuestras expectativas y darnos cuenta de que los niños necesitan más tiempo para que se despliegue su desarrollo".
"La idea es esta. El cómo importa. A la hora de ir a la cama puedes utilizar una amenaza: Acuéstate pronto ahora o no hay cuento. O puedes decir: Si te acuestas ahora, tendremos tiempo de leer. Pero si no te metes en la cama enseguida, no habrá tiempo y nos quedará más remedio que saltarnos la lectura".
También resume otros principios además de la conexión como la EMPATÍA aceptando sus emociones, subrayar lo positivos, la INTEGRACIÓN, enfocar la situación de manera creativa. En ellos es fundamental conocer el por qué están pasando esos hechos y en el que hablar demasiado no ayuda. Es mejor ser concisos y claros. Hablar sin estar alterados y donde los sermones largos no tienen cabida.
Por último me quedo con esta frase, "Sabiendo que nunca es demasiado tarde para realizar un cambio positivo".